Mi verdad sobre Virginia Maestro

Después de estar prácticamente 3 meses sin hablar de forma directa de Virginia Maestro creo que ha llegado el día de escribir sin retórica sobre ella, es el momento de mostrar mi verdad. Mucha gente me ha pedido por favor que vuelva a comentar cosas de Virginia, desgraciadamente si hasta ahora no lo he hecho es porque todo lo que tengo que contar ahora mismo considero que es demasiado amargo. Este pequeño ladrillo sé que molestará tanto a quienes creen que no se puede seguir la evolución de la carrera de una artista con tanta implicación o confunden crítica con ataque o imposición, como a aquellos que me quieren y saben las horas que he dedicado, probablemente en vano, a algo que parecía haber superado. A estas alturas me da igual, el cuerpo me pedía sacar este texto y creo que no hay mayor lealtad que ser fiel a uno mismo.

Nos encontramos en el pistoletazo de salida del segundo disco. Un nuevo trabajo en el que de confirmarse las palabras de la propia Virginia: todas las canciones serán compuestas por ella, se acercará mucho más su estilo musical y estará bastante más implicada en el proceso de producción. Debería haber una gran corriente de optimismo alrededor de su carrera ¿no creéis? Sin embargo no es ilusión lo que desde fuera se puede percibir, desde hace unos meses todo o una gran parte del entorno de Labuat está envuelto en una tremenda nebulosa que no deja ver nada y que igualmente impide fiarse de nadie, y esto es así porque esas palabras tristemente ya nos suenan.

Al problema de no encontramos en la ingenua posición del lanzamiento del primer disco añadimos igualmente que todo en un año ha degenerado de forma absolutamente brutal: la infantilización de todo lo que rodea a Labuat, el apostar por caminos absolutamente agotados como vía casi única, la perdida de seguidores día a día, la desconfianza, e incluso el rechazo que se está viviendo, no se trata de una cuestión de modas pasajeras que caducaron, de gente que tenía interés en ella y se largaron porque Virginia no hizo exactamente lo que ellos querían, tampoco se trata de algo sólo atribuible a males de la industria discográfica..., en su gran mayoría se trata exclusivamente una cuestión de elecciones. Elecciones tomadas por la propia Virginia que han desencadenado la situación actual y que han hecho que en pocos meses su número de seguidores se haya dividido entre 20 y la media de edad lo haya hecho entre 2. Ella ha metido su propio futuro artístico en ese gran signo de interrogación de algo que parecía bien encaminado, y si lo ha hecho creo que es por una razón que quiero desarrollar a continuación: la Virginia Maestro "persona" se está comiendo a la Virginia Maestro "cantante" y lo peor de todo es que intuyo que ambas acabarán francamente mal.

Echemos la vista un año atrás: Virginia Maestro entraba a grabar con uno de los grupos más considerados de la escena independiente española en una major como Sony Music. Un disco que quizás no daba cuenta de todo el potencial que Virginia atesora, que podría haber sido mejor o peor, pero en el fondo una buena producción para lo que en general hay en la música comercial española, con 4 o 5 temas extraordinarios; donde lo mejor de todo era que se ponían buenos cimientos para construir una carrera futura basándose en la calidad, música y prestigio. Así mismo, y como decía Mister Furia en uno de los Podcast de The Pinker Tones, el día que Labuat presentó como single “Soy tu aire” supuso el portazo definitivo de Virginia hacía OT, desmarcarse de una vez por todas del programa de marras. A ese disco le siguió una gira, que si bien no fue todo lo extensa y exitosa que prometieron, si lo fue en lo artístico puesto que Virginia mejoraba todas las canciones del CD y añadía versiones estupendas, era al menos el entrenamiento necesario para una futura explosión que de seguir la progresión sin duda llegaría. En general Labuat quizás no terminó de arrancar por quedarse a medio camino en casi todo, en parte por el mensaje difuso de la propuesta, y también claro está, por la torpe y pobre apuesta de su compañía a la hora de distribuirla. Por la música que le gusta y hace Virginia es difícil encajarla en ese mundo de las radiofórmulas españolas que es prácticamente el único canal de distribución que conocen en Sony España, y lograr entrar en otros viniendo de OT requiere de algo de tiempo y paciencia. A mi entender con los mimbres que se estaban poniendo había una buena predisposición a poder crecer en el futuro y alcanzar esos otros espacios, no obligatoriamente con los mismos acompañantes y pudiendo realizar un proyecto mucho más personal. En general mi opinión es que estaba todo bastante bien encarado, aunque como siempre con matices.

Sin embargo desde hace unos meses, hablar de Labuat es hablar de la historia de una chica perdida en la industria del mainstream, pero mucho más perdida en si misma; víctima de sus miedos, desconfianzas, inseguridades y desconocimiento del medio como debutante que es. Tiene prisa, miedo a desaparecer, a que se olviden de ella, quiere llegar a todo el mundo y sus nerviosas elecciones (basadas muchas de ellas en teorías obsoletas en estos tiempos cambiantes) pienso que son absolutamente erráticas ahora y aún peores para el futuro. Ya no sólo está perdida en ese mundo sino que se adentra en otros de aún peor cartel y muchísimo más peligrosos; entre ella y Nieves Álvarez como representante, y contradiciendo a Mister Furia, han reabierto de par en par las puertas de Operación Triunfo y parecen haber tomado ese camino casi como “el único” porque es fácil, rápido vitoreado, y ahora mismo parece que da algo de dinero. El problema es la absoluta falta de miras, el estar apostando por una vaca que ya no dará más leche a no ser que cambies totalmente tu propio estilo musical, pero lo peor de todo es que reabriendo la puerta de OT, la corriente está cerrando las ventanas que con el disco tímidamente se abrieron, están tapiando poco a poco ese futuro de prestigio, calidad y música; el clavo ardiendo al que se agarra es el mismo que podría cerrar mañana su ataúd artístico. Virginia cada vez aparece más aparece en Televisión, prensa y bolos en el mismo saco que los triunfitos, añado además que triunfitos de los malos, de los que son conocidos por ser tertulianos de AR, ir a Islas de Famosos o populares por no cantar ni tener compañía discográfica, cada día le vemos aparecer en más photocalls para que la fotografíen y "no nos olvidemos de ella". Desde fuera yo lo percibo como un interés creciente por no perder la fama, la sensación que podría quedar para el público interesado en la música y que jamás ha visto un concierto de ella está clara: “juguete roto”, probablemente esa persona ya sea difícil volver a ganar. Así de cruel e injusto es el etiquetado que todos seguro más de una vez hemos hecho.

El mundo del arte está lleno de gente con muchísimo que ofrecer que se muere de hambre por no tener los contactos, la cabeza o el golpe de suerte necesario para hacerlo, y gente sin ningún potencial que sobrevive porque saben exactamente lo que son y cual es su camino, tienen jeta y juegan con inteligencia en definitiva. En mi entrada anterior en el blog comentaba irónicamente que buscaba un Brian Epstein; para quien no lo conozca Epstein fue el Manager de los Beatles, consiguió hacer que un grupo que tenía un buen cartel solamente en Liverpool se convirtiera en el grupo más popular de la historia de la música, y para muchos también el mejor. Cuando Brian conoció a los Beatles, los Fab Four comían encima del escenario, se ponían a hablar con las Fans o interrumpían sus canciones en mitad de las mismas; así mismo aceptaban casi cualquier trabajo que supusiese dinero, vivían el día a día sin pensar más allá de ahí. Brian Epstein sencillamente les puso un caché y unas condiciones mínimas por debajo de las cuales no se trabajaba puesto que era tirar contra sus propios representados, limpió sus actuaciones en el escenario haciéndolos mucho más “formales” sin quitarles ningún tipo de personalidad, en definitiva les marcó el camino y corrigió aquellos pequeños defectos que les estaban impidiendo avanzar. Los Beatles eran un diamante enorme no pulido, más valioso que ningún otro pero sin rumbo definido. Brian asumió ese papel fue capaz de coger ese gran talento y, sin necesidad de quitarles lo que les hacía diferentes, hacer llegar ese mensaje al público adecuado, claro está que el talento que tenían hizo el resto. Nadie nos puede decir como hubiera sido la historia de no aparecer él en su camino, estoy seguro que al menos distinta.

Y es una de las cosas que veo que falta en el Universo de Labuat/Virginia, esa referencia, ese camino, inteligencia, visión de futuro, un bastón donde apoyarse es fundamental y más cuando se es tan insegura. La entrada de Nieves Álvarez como Manager, tan aplaudida en su momento, es verdad que ha traído más conciertos estupendos (nadie va a discutir la pericia de Nieves en ese campo) pero también el “todo es trabajo” o el "es promoción" como falsos lemas, aceptando bolos y participaciones públicas sin ninguna mira hacía el futuro, que lo único que están haciendo es meter a Labuat en la Liga de Regional Preferefente cuando no hace tanto jugaba en una buena competición. Así mismo, coincidencia o no, desde entonces todo lo que sobrevuela su carrera se ha vuelto mucho más infantil y su estilo encima de un escenario lejos de pulirse como ocurrió con Epstein y los Beatles se ha ensuciado, ahora mismo en todo lo que rodea al espectáculo de un concierto Virginia parece una artista mucho más amateur que cuando comenzó la gira. Conciertos como el de Toledo están más cercanos en lo que rodea lo no musical a un Show de Rosa León que a un recital de música con influencias de Bossa, Soul y Jazz como se han encargado machaconamente de decir que estaba lleno Labuat en sus notas de prensa, afortunadamente cuando canta sigue siendo maravillosa y especial. No parece haber camino ninguno marcado, todo da sensación de chapuza y absoluta falta de comunicación entre los distintos estamentos de Labuat, día a día se improvisa dependiendo en demasía del estado de ánimo de Virginia y si ese día ha decidido que todo es blanco, negro o... azul. Las prisas lo envuelven todo, las mismas que tiene ahora estrenando versiones de forma atropellada en los conciertos, porque sabe desgraciadamente que es casi lo único que ata a muchos a todavía hacer un seguimiento mínimo de su carrera, lo triste es que en muchos casos esos estupendas covers ya dan igual, es tarde.

Lo peor de todo es que en su momento Virginia pudo elegir, en realidad siempre ha podido hacerlo. Tuvo en sus mano poder escoger entre plegarse a la industria mainstream y ser “una más” (y no la mejor) o intentar otra cosa echándole valor y sobre todo muchísima inteligencia y tiempo para salir inmune de esta etapa complicada que ahora le toca vivir. Pero al minuto de juego tuvo miedo y eligió el camino más cómodo, apostó en exclusiva por una compañía que sólo se acuerda de ella cuando puede sacar dinero en SMS con programas estúpidos y cuya utilidad aún está por demostrar, o la utilizan como escudo para sus reivindicaciones gubernamentales demostrando tremenda docilidad. Una compañía que cualquier intento de colaboración para intentar resaltar los valores y diferencias de su contratada ha sido automáticamente ignorado porque sencillamente no les interesa lo más mínimo el arte. Todo esto lo ha fomentado la propia Virginia y por supuesto ha dado su beneplácito y ha optado por la táctica del avestruz en lo relativo a estas cuestiones; en pocos meses han desaparecido la mayoría de espacios que buscaban esa calidad, música y prestigio por encima del mensaje a 1,30 + IVA y la fama. Mi impresión es que Virginia jamás ha podido ser capaz de ver más allá de ella, nunca se dio una vuelta para ver como a todo lo relativo a su carrera se intentaba aplicar un barniz de calidad para poder atrapar a aquellos que por estilo musical correspondía. Propuestas tan estupendas como la Radio “En la Orilla de Favre” donde primero de todo estaba la cultura y luego también Virginia Maestro, no eran sino la opción más inteligente de promoción de su carrera por encima de intentar a toda costa la aparición en los medios.

Lo que además temo es que ni la propia Virginia Maestro cree realmente en Sony y en el apoyo que en teoría le van a brindar próximamente; los contratos vencen o se rompen, pero para la constante perdida de interés la solución es bastante más complicada y jamás se debería olvidar que quien realmente paga a Virginia son los que compran su música y van a sus conciertos, no Sony Music España. Por eso más complicadas de entender son sus elecciones ya que están marcando su futuro artístico más allá de contratos que terminan por acabarse, y estas elecciones además parecen estar casi siempre mediatizadas por el miedo, por la duda, por una inseguridad preocupante. Quizás no merece la pena remontarnos tan atrás puesto que el camino ya está hecho, pero todo viene por una elección igual que en su día Virginia pudo elegir presentarse a OT o seguir una senda más larga a través de otros métodos. No tengo ninguna duda que si hubiera tenido la capacidad o un "Brian Epstein" a su lado necesario para poder hacerlo y con canciones como “Circus” o “I call your name” a través de una herramienta como MySpace, Virginia Maestro representaría hoy en día un fenómeno exactamente igual que artistas como Russian Red o Anni B Sweet, estoy seguro además que yo estaría igualmente siguiendola.

Duele igualmente la sensación de asimilación del fracaso, de pérdida de casi todo, resignación, falta de carácter y como parece dar igual, incluso parece estar encantada.... Realmente si observamos toda la trayectoria de Virginia Maestro, hay cuestiones que se repiten cíclicamente como si de un nuevo libro de la saga Fundación de Asimov se tratase y las matemáticas obligaran a repetirlas a lo largo de la historia: el abandono, el silencio que precede a la ruptura el que siempre los demás parecen tener la culpa de todo lo que pasa... Podría haber ocurrido tiempo antes de entrar en OT, ocurría durante el mismo, está ocurriendo hoy y parece inevitable que pase en el futuro. Ayer el malo era Risto, hoy unas personas que la “machacan personalmente” y que están decepcionados porque no han podido manipularla para obtener su disco de Blues y Jazz en Inglés (pobres ilusos quienes aún piensan esto o siguen revolviendo con ello), no cuesta imaginarse que los Pinker Tones podrían ser los siguientes en bajarse del carro de Labuat y que pasado mañana la mala pudiera ser Nieves... o alguno de vosotros. Ella debe plantearse porque siempre pasa esto, que es lo que está fallando, o si siempre el fallo es ajeno. Yo estoy seguro que muchos de esos “abandonos” citados vienen motivados porque la Virginia Maestro “persona” se termina fulminando con sus miedos, inseguridades, cambios de rumbo etc.. a la "cantante", y al final evidentemente la mayoría de gente que la rodea termina mareado y no se puede sino dejarle volar sola y que ella misma se estrelle una y otra vez, no queda otra. Tristemente da vértigo mirar atrás y sacar la lista de nombres y sitios, y no hablo de gente anónima, sino de personas que la querían y seguro la siguen queriendo y que le han tenido que dejar a su suerte. Desgraciadamente, en mi opinión, parece que la singularidad de Virginia Maestro se termina en cuanto acaba la última de sus notas.

Alguno me reprochará, si tanto te ha decepcionado Virginia ¿por qué sigues opinando sobre ella? ¿por qué te expones al remover todo de nuevo? ¿a atizarla y por ende a que te aticen? Pues porque ella jamás representó para mí una moda pasajera, cuando la escuché en la tele, cuando empecé a investigar sobre ella, a escuchar sus primeras canciones propias alucinaba: tanto en timbre de voz, estilo musical que siempre escuché, composiciones propias que desde el minuto uno pedí, imagen conmovedora.. ella paraba mi mundo. Creedme por favor que yo jamás he tenido prisa (a mi parecer es Virginia la que más parece tenerla), ni he intentado llevarla un sólo metro a mi terreno, sencillamente he intentado traer precisamente a mucha gente al suyo, al que ella marcaba. Yo la he querido con locura como artista, creedme que uno no golpea un árbol si no tiene frutos y ni mucho menos lo seguiría haciendo, jamás hubiera dedicado el tiempo que he dedicado a este texto sino me pinchara en el alma su situación actual, probablemente no haya dado más minutos de mi ocio a nadie en la vida. Lo siento pero va a ser demasiado doloroso observar como Virginia Maestro se estrella, aunque por supuesto es su carrera y es su camino escogido como tanta gente se encarga de decirme, pero su trayectoria le lleva inevitablemente a donde le lleva y no sé si alguien a su alrededor está siendo capaz de decírselo. Paradójicamente pienso que cuanto más cerca está del fracaso en el mundo mainstream, más probable sería poder hacer que Virginia reaccione y pudiera empezar de cero centrada exclusivamente en su música, pero no puedo dejar de pensar como le dolerá, porque no deseo sufrimiento a nadie y porque ese fracaso escocerá el triple porque no será por su valía como cantante o compositora, sino por sus nefastas elecciones condicionadas por sus prisas y miedos. “Virginia Maestro siempre fue la cantante que toda mi vida esperé”, os aseguro que no es una frase hecha, claro que medí mal y no conté con la Virginia Maestro "persona", y como podría llegar a arruinar a la otra.

Voy a tomar la osadía de dirigirme, espero que no por última vez, directamente a la propia interesada aunque lamentablemente sé que no me va a leer porque desde hace tiempo parece que se ha querido alejar de cualquier elemento crítico a su alrededor. Lamento si suena a imposiciones, creerme que nada más lejos de la realidad, es simplemente mi carta de deseos para 2010 con una tremenda humildad. Estoy seguro que de cumplirse aún habría tiempo:

Estimada Virginia Maestro:

Escribo esta carta a la Virginia Maestro “persona” y no a la "artista". Sé que he sido el primero en pedir siempre que se opine sólo de tu música, pero creo sinceramente que tu parte personal está dejando que la artística vaya a tener serios problemas para su supervivencia en la escena músical y ambas además están íntimamente ligadas.

Te deseo para este 2010 que antes de resolver tus problemas artísticos y/o empresariales resuelvas tus propios debates internos. Creo que no habrá futuro ninguno con esa falta de confianza, con el miedo, la inseguridad.., aunque hagas un gran disco no valdrá para nada. Es normal tener dudas de vez en cuando pero no que te condicionen tantísimo. Creo que no habrá camino si no se traza de antemano si se improvisa. ¡Lucha por tu futuro! No te resignes, no queda sólo una vía. Labuat fue un buen cimiento, espero sepas aprovecharlo sin perder el norte a pesar de los bajones habituales de cualquier trabajo.

Me encantaría que no fueses capaz de llegar a todo el mundo, que algunos te olviden pero que sepas que ese olvido, como pasa con cualquier artista, fue porque tu música sencillamente les dejó de interesar, y no porque un día no apareciste en una revista o en la tele en un programa de corazón. Que sencillamente te gustes a ti porque es el camino más corto hacía el éxito y que tengas claro que al que le gustes lo será exclusivamente por tu trabajo.

Ojalá puedas llegar a pensar que todo es trabajo pero no todo trabajo es bueno, que a veces abres una puerta y de entrada se cierran tres ventanas. Que te llegue el prestigio desde la madurez de tus 27 años, pero sabiendo que no llega por sorpresa sino porque se busca. Que llenes tu vida de mucho más humor porque denota inteligencia, que nos recomiendes cultura porque la cultura debería ser quien te dé de comer.

Desearía que tuvieras cerca gente inteligente que aprecien tu arte, para los que no sólo representes una comisión o una hoja en el Excel y sepan darte un bofetón cuando haga falta sin ser palmeros ni tampoco especialmente duros. A los que tampoco hará falta que sigas a pies puntillas lo que te digan, pero si que al menos los escuches y te quedes con lo mejor de cada discurso.

Espero que no vendas a tus niñas tal y como me prometiste una vez, sino las dejan ser tal y como nacieron que te las guardes para ti. Maltratar a una sola de ellas ya te convertiría en mala madre, ¿como se podría entonces pedir respeto si uno no se respeta a si mismo y a su prole? Ya habrá tiempo para que vean luz tal y como son, no tengas prisa porque Roma no se hizo en un día.

Me gustaría que sepas cerrar todo aquello que está todavía sangrando y que a día de hoy no has intentado curar porque también es tu futuro y sobre todo porque en ocasiones hay que mirar al pasado para entender nuestro presente y el global de nuestra vida. A veces hay que observar más allá de uno mismo, hacer examen de conciencia y afrontar los problemas cara a a cara. El futuro es de los valientes.

Esa es toda mi hoja de deseos para ti en el 2010. A la Virginia Maestro “cantante” de momento no puedo pedirle sino que siga como hasta ahora, fíjate que ni le deseo un disco en inglés de blues o jazz. Es todo lo que puedo decir hasta que ambas partes puedan convivir y converger dando como resultado a una sola Virginia Maestro. Sea cual sea, sin exigencias...


Al resto espero veros pronto, sería la mejor señal.

VIKIBILBAO